Chanel deslumbra en Villa d'Este con su colección Crucero 2025/26

Chanel volvió a reafirmar su lugar como sinónimo de sofisticación atemporal con un desfile Crucero 2025/26 celebrado en un escenario de ensueño: Villa d'Este, a orillas del icónico Lago de Como. La maison transformó este palacio renacentista en un paraíso donde la moda y el arte de vivir se fundieron en una misma inspiración.

La elección de Villa d'Este no fue un gesto casual. Su magnificencia histórica y la poesía de sus paisajes se convirtieron en el marco perfecto para expresar el espíritu de la colección: un lujo relajado, soñador y contemporáneo, pensado para una mujer que se mueve con naturalidad entre la tradición y la modernidad.

La mirada delicada de Sofia Coppola impregnó el evento, aportando una atmósfera cinematográfica que ya había sido anticipada en un adelanto visual protagonizado por Ida Heiner. Entre mármoles, terrazas ocres y vistas de ensueño al lago, la modelo lució shorts de talle alto, bañadores refinados y accesorios que reflejaban la maestría artesanal de la maison.

El desfile, que podrá descubrirse en su versión cinematográfica el 30 de abril a las 14:00 (hora de París) a través de Chanel.com, propone mucho más que una simple presentación de temporada: es un manifiesto que celebra la belleza de lo eterno frente al paso del tiempo.

Bajo un sol estival, con la terraza de Villa d'Este reconvertida en pasarela, los invitados fueron tomando asiento entre sombrillas y mobiliario clásico de forja blanca. La colección desplegó ante sus ojos un armario de verano ideal: bañadores, vestidos fluidos, conjuntos de dos piezas, sombreros y detalles de tweed, todos teñidos en tonos pastel, rosas suaves, blancos impolutos, azules delicados y matices metalizados.

La alta costura tampoco faltó en esta cita de ensueño. Vestidos largos vaporosos, decorados con flores en 3D, total looks satinados acompañados de guantes ópera y un despliegue de perlas completaron un homenaje a la elegancia que Chanel siempre ha sabido encarnar.

Este desfile, enmarcado por la majestuosidad italiana, no solo consolidó el legado de la maison fundada por Coco Chanel, sino que también abre el camino hacia un nuevo capítulo creativo, a la espera de la llegada de Matthieu Blazy como próximo director artístico.

Una vez más, Chanel nos recordó que el verdadero lujo es saber detener el tiempo... aunque sea solo por un instante.