La Corte Suprema confirmó la condena a Cristina Kirchner: 6 años de prisión e inhabilitación perpetua
La Corte Suprema dejó firme la condena contra Cristina Fernández de Kirchner por administración fraudulenta en la causa por la obra pública en Santa Cruz. También ratificó su inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó este martes firme la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra Cristina Fernández de Kirchner, tras rechazar por unanimidad los recursos presentados por su defensa en la causa conocida como Vialidad.
El fallo del máximo tribunal, integrado por Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, sostuvo que la ex presidenta recibió un juicio justo y que "la sentencia se encuentra debidamente fundada en derecho". En ese sentido, desestimaron los planteos sobre supuesta parcialidad del tribunal y falta de garantías procesales.
UNA CONDENA HISTÓRICA QUE MARCA UN ANTES Y UN DESPUÉS
La causa investigó irregularidades en la adjudicación de 51 obras públicas viales en la provincia de Santa Cruz, ejecutadas durante los gobiernos kirchneristas. Según el fallo, Cristina Kirchner priorizó intereses particulares por sobre los del Estado, al beneficiar de manera directa a las empresas del empresario Lázaro Báez, también condenado.
Junto a ella fueron sentenciados el ex secretario de Obras Públicas José López y otros ex funcionarios. En diciembre de 2022, el Tribunal Oral Federal N.º 2 había dispuesto además el decomiso de más de $84.800 millones, al considerar acreditado el esquema de corrupción.
LA CORTE TAMBIÉN RATIFICÓ LA ABSOLUCIÓN POR ASOCIACIÓN ILÍCITA
Además de confirmar la pena por administración fraudulenta, el máximo tribunal rechazó un recurso del Ministerio Público Fiscal que solicitaba revertir la absolución de la ex mandataria por asociación ilícita. El pedido fue considerado "inadmisible" bajo el artículo 280 del Código Procesal Civil y Comercial.
EL FALLO CIERRA LAS INSTANCIAS ORDINARIAS
Con esta decisión, se agotan las vías ordinarias de apelación y queda firme una de las condenas más resonantes de la historia judicial argentina. La Corte señaló que la sentencia se basó en pruebas sólidas y un proceso ajustado a derecho, desestimando los cuestionamientos presentados por la defensa como una simple reiteración de argumentos ya rechazados.
"No alcanza con ofrecer una interpretación alternativa para desacreditar una sentencia", afirmaron los jueces.